- El embalse de Tibi es una de las obra hidráulicas más antiguas del territorio nacional, por tanto es un orgullo que se encuentre situado en la provincia de Alicante. Data el inicio de su contrucción del siglo XVI, allá por el 1580 ...
- Retiene agua del río Monnegre y está declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento.
- La ruta es modesta, una de esas mini-rutas que se pueden realizar en un día soledado para descubrir un lugar con mucha historia.
- Para llegar a la zona donde se deja el coche hay que tomar un camino que hay en la misma gasolinera que está junto al Maigmó, hay carteles indicadores que nos direccionan perfectamente, no tiene pérdida.
- Se zigzaguea con el coche por caminos hasta llegar a un punto de la carretera que ya no se puede avanzar al haber una valla, toca dejar el coche a un lado y continuar andando, todo según lo previsto.
- Así se llega rápidamente a una curva con un puente y en el fondo ya se divisa la presa. Se llega por un angosto camino con pasamanos.
- Tuve la suerte de que días antes había estado lloviendo (y en cantidad) en la zona de Alicante, así que el embalse estaba a rebosar literalmente hablando.
- Por un lado de él, la cascada de agua era espectacular y la caída junto a los tonos verdes en la piedra me pareció excepcional.
- Así se llega a la misma pared del embalse, al lado una plataforma que nos acerca más todavía.
- En un lateral hay una serpenteante escalera tallada en roca que nos permite subir a lo más alto de la presa, vértigo fuera. Hay alambres que facilitan el ascenso.
- Ya en la parte superior vemos como el agua retenida hace todo lo posible por continuar su curso natural debido a su gran cauce y rebosan las rocas del embalse por donde puede, dejando una pequeña capa de agua a nuestros pies.
- Pasamos el aliviadero del agua retenida mediante un puente y realizamos una pequeña visita por las laderas del embalse y su zona, donde se encuentra una casa de piedra en desuso. Al lado hay unos miradores de roca que dan al embalse, idóneos para tomar algo y disfrutar del paisaje y del sonido del agua al caer.
- En la inspección de la zona se descubre un pequeño camino que acortaría la vuelta al coche, pero lo deseché por querer bajar de nuevo por las escaleras de piedra de la presa.
- Tras un tiempo de tranquilidad toca regresar, la bajada por los peldaños de piedra hay que hacerla con precaución.
- De nuevo un último vistazo al embalse y regreso al coche, esta vez un pequeño repecho.
- -------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------